PORTÓN DE TORILES

PORTÓN DE TORILES
"POR UNA FIESTA ÍNTEGRA"

sábado, 9 de julio de 2011

DAVID MORA SALVÓ LA TARDE

Pamplona, viernes 8 de julio, 2.011

2ª corrida de feria

Toros de: "CEBADA GAGO", bien presentados y astifinos; mansos y descastados; 1º, 2º y 4º debieron ser devueltos por falta de fuerza, pero nadie los protestó. Pamplona en este aspecto sigue siendo "impresentable". Y al que se le ocurre dar alguna palmada de tango para intentar la protesta, el listo de turno le suelta: ¡¡"sal tu, listo"!!

  • 1º- Inválido y descastado
  • 2º- Inválido y descastado
  • 3º- Enrazado, siempre a menos
  • 4º- Inválido y descastado
  • 5º- Manso, enrazado
  • 6º- Manso, flojo, enrazado

Para:
  • FRANCISCO MARCO (verde botella y oro) silencio y silencio
  • MORENITO DE ARANDA (azul pavo y oro) silencio y silencio
  • DAVID MORA (purísima y oro) vuelta la ruedo y oreja

Presidente: D.JUAN FROMMKNECHT
Asesor artístico: D. FERNANDO MORENO
Asesor veterinario:

Incidencias: Tarde calurosa, y con nubes que hacen que la sensación sea de bochorno. Lleno en los tendidos, y como la tarde anterior sin apreturas. La reventa con mucho papel en el bolsillo. Las peñas dieron un lamentable espectáculo, siendo impresentable su comportamiento durante la muerte del sexto, en el que se lanzó de todo al ruedo, alcanzando incluso al matador David Mora más de un objeto. El del marcador informativo, sigue sin dar el nombre de los componentes de la presidencia.


David Mora con el tercero de la tarde

Siendo sincero, dar muchos rodeos para calificar una corrida de toros, toro a toro como en la reseña, es rebuscar demasiados adjetivos. La corrida sería calificable, en conjunto, como una auténtica moruchada, mansa, descastada y con una preocupante falta de fuerza. La disposición y buen hacer de un torero como David Mora tapó los muchos defectos del lote menos malo, que tocó en suerte por la mañana en el sorteo.
En el tercero de la tarde, Mora dio muestras de que no venía a pasar el tiempo, ni tan siquiera después de ver el juego de los dos primeros, que correspondieron a sus compañeros de cartel. A este tercero, primero de su lote, lo midieron mucho en el caballo, dejándolo prácticamente crudo para que aguantara un poco más. Tuvo buen son en banderillas, costándole mucho humillar en el capote de brega. Mora lo entendió a la perfección, dejándole ir a a su aire en los primeros muletazos de tanteo y por alto, para posteriormente pasar al toreo en redondo, perdiéndole pasos en todas las tandas y no agobiar al toro, además de tragarle y consentirle mucho al toro. Por menos el jueves se pidieron orejas. Hubo leve petición y dio la vuelta al ruedo por méritos propios.
Con el que cerraba plaza, un manso que tuvo más genio y un puntito más de raza que sus hermanos, Mora lo volvió a entender a las mil maravillas. Volvió a pasarse los pitones muy cerca, y logró dos tandas de derechazos excelentes; sublime la segunda. Intentó el toreo al natural y de nuevo ligó dos tandas, igualmente meritorias, con naturales de bella factura. Se tiró, literalmente, entre los dos pitones al entrar a matar, pinchando y saliendo volteado, y prendido por la axila. Pudo ser peor, pero San Fermín estuvo al quite. Se volvió a tirar para lograr una estocada que dejó la toro amorcillado tras buscar la puerta de chiqueros. Tardó en descabellar pero acertó al primer intento Se le pidió y concedió una oreja muy merecida.

El local Francisco Marco topó con un lote imposible, de embestida rebrincada y sin recorrido el primero, al que mató de estoconazo fulminante. Igualmente, su segundo que quedó parado tras la suerte de varas, siendo de nuevo imposible el lucimiento. Mató mal, haciendo "guardia" el estoque. Se silenciaron sus dos actuaciones.

Y remataba la terna el burgalés, Morenito de Aranda, que se dio excesiva coba tras brindar el quinto, soso y sin transmisión, con el que además no se confió un solo momento. Con el segundo de la tarde sufrió las embestidas a la defensiva del astado, que embestía a las hombreras de su chaquetilla.

Sinceramente... creo que CEBADA GAGO ha ganado ya un descanso en la feria del toro de próximas ediciones.
Fatal el público, que no valoró la primera actuación de David Mora, y penosa, repito: lamentable el comportamiento final de parte de las peñas.

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