PORTÓN DE TORILES

PORTÓN DE TORILES
"POR UNA FIESTA ÍNTEGRA"

domingo, 16 de octubre de 2011

A VER SI DE DAN CUENTA DE UNA VEZ

Esta fiesta sí es la mía. Esta fiesta, es la que quiere el aficionado. El toro encastado, el toro mostrado en todo su esplendor. La emoción de la fiesta por excelencia. Sólo hacen falta ganas de querer hacer las cosas bien, de saber que mostrando al toro, el aficionado, el público, saldría de la plaza de manera diferente. A ver si se dan cuenta de una vez.

Ayer en Zaragoza pudimos vivir la emoción de la fiesta. Una vez más, y son pocas las ocasiones en que podemos decirlo, una plaza de toros puesta en pie disfrutando con la suerte de varas, con el interés de los toreros por poner los toros en suerte, de ver torear a caballo, de ver las arrancadas de lejos de los toros de Cuadri. Ayer, no estaban los que pitan cuando sale el caballo, o por lo menos tuvieron que tragarse los pitos. Ayer, quizá, sólo quizá, estos que pitan la suerte de varas, dijesen que "eso sí". Poner el toro, citar, verlo venir,  echar el palo (aunque hay que decir que ayer hubo poca "puntería"), y medir al toro, sacarlo y volver a ponerlo en suerte. Así, cuantas veces quieran, o aguante el toro.

 A ver si se dan cuenta de una vez.

El segundo toro de la tarde salió "tontorrón", enterándose, diciendo que aquello no iba con él; frenándose ante los capotes, hasta que "Paulita" le echó el capote abajo y se lo fue sacando hasta los medios encelándole, "arrematando" con una revolera de buen aroma, no una cualquiera. Comento con Javier que ese toro, una de dos, o sale pegando botes del caballo, o lo pone patas arriba. Fue lo segundo; derribó con emoción, lo volvieron a poner más largo y volvió a venirse con alegría. El toro, creo yo, más fiero que bravo. "Paulita" quiere poderle, inicia con dos trincheras por bajo,  con sabor añejo. Debió seguir así, con toreo antiguo, por desgracia tan en deshuso hoy en día, con ese arte que él tiene, hasta haber podido al toro.
En fin, soñar es libre, no cuesta nada y a nadie ofendes.

Llegó el cuarto y Castaño lo lució de principio a fin. Tres entradas de lejos y una suerte de varas magistral (un poquito peor de ejecución, pues el piquero no acertó a cogerle arriba); de nuevo la emoción en el ruedo, y despedida del picador con la plaza puesta en pie. Seguramente la ovación más larga que se habrá escuchado en este Pilar 2.011. Brillante tercio de banderillas de David Adálid, citando torero, sacando los palos de abajo y clavando arriba, saliendo airoso. Calidad y nobleza en la embestida. Castaño lo cita de lejos y se centra con el animal. Le puede y se pega un arrimón, de verdad. Ante un toro, no ante un bobo con cuernos. Una pena que no acertara a matarlo, porque tenía cuando menos, una oreja asegurada. Oreja de ley. Y otra pena que el toro, bravo y noble, no tuviera fuerza.

Estos dos toros fueron para mí los más importantes de un lote que, en mí opinión, adoleció de falta de fuerza. Falta que se suplió con casta, raza y un interés por hacerles las cosas bien. La corrida no pasa de ser una más... Pero las cosas bien hechas dan más importancia a la fiesta. La corrida de Cuadri, muy bien presentada, sin "sardinas", sin sospechas, y poniendo el interés de principio a fin. No rompió ninguno como hubiésemos querido todos los que allí estábamos, pero los "Cuadris" no aburrieron a nadie. Y, quieran o no, la suerte de varas, es fundamental. Pero bien hecha; como ayer. Y los toros bien puestos en suerte; como ayer.

¿Álguien se imagina ayer la plaza llena, en tarde de "figuras", haciendo las cosas como las hicieron, Castaño, "Paulita" e Iván García? Claro, ayer no estaban, los "Manzanares", "Talavantes", "Ponces" y sus aduladores, y no se veían claveles "reventones".

Un aplauso a Castaño, "Paulita" y García, por dejar ver los toros, principalmente en el caballo. Toreros como estos quiero yo, aunque luego con la muleta no estarían acertados, como ayer fue el caso de Iván García.

A ver si se enteran de una vez.

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